El hijo del conde Zaroff ha heredado de su padre su pasiòn por la caza, y como no, en este film matarà a un montòn de hermosas mujeres en una espiral de locura, violencia y sadismo de dimensiones estimables.
Primero, en una casa de campo, se dedicarà a recoger hermosas autoestopistas a las que les mete mano y se las folla. Luego estas, viendo que el tipo està mas loco que una regadera, escapan y este luego las persigue a caballo o en coche, hasta cargarselas.
Hasta ahì el film es una patata del montòn, pero cuando el tipo se va a su grandioso castillo, el film gana mucho.
En el castillo hay un desfile de bellezas que salen en pelotas realmente entretenido, ademàs de mostrarnos lindezas como una zorra bailarina danzando alrededor de un grotesco ìdolo africano(luego descubrimos que le molaban las pollas negras) o una impagable escena de una mujer huyendo desnuda por el castillo, y es atacada por un enorme perro gran danès(el cabròn parece un pequeño caballo) y cuando la mujer se pone a cuatro patas huyendo, y le pone el culo mirando a Pamplona al feroz chucho, este se le tira encima en lo que parece el inicio de una secuencia porno de zoofilia. Afortunadamente la mujer, antes de que Scooby Doo la engatille a cuatro patas, se logra zafar y escapa corriendo del animal que no sabemos si està furioso o cachondo.
Luego tenemos la grandiosa escena de la pareja presa de un especie de maquinaria medieval hecha para martirizar y matar gente, en la que una plataforma llena de afiladas barras de metal cae para atravesarlos como si fueran brochetas de carne. Algo mil veces visto en otros films y videojuegos(en los que la gente escapa siempre) pero que en esta ocasión aquì no hay suerteo margen de error, y la desventurada pareja la palma como Felipòn.
Al final todo acaba en una especie de sorpresa shock, que tira al cine de fantasmas y venganzas de ultratumba.
La pelìcula, en resumidas cuentas, mezcla castillos, una ambientaciòn gòtica y un montòn de mujeres de buen ver desnudas, con asesinatos. La cosa no es que sea genial o una obra maestra, pero se deja ver y es bastante entretenida.
A mí, personalmente, me gustò bastante. Lo que no dejo de preguntarme es como o porquè este film fue prohibido en Francia en su tiempo, cuando tampoco es algo superviolento o escandaloso. No creo que por mostrar algunos desnudos frontales integrales o algunas escenas bastante lights de sadomasoquismo, fueran motivos suficientes, pero quien sabe. Igual a algùn censor medio religioso y puritano, se le indigestò la pelìcula.
Es mas bien un film de terror convencional de su tiempo, eurohorror o horrorerotica, o como quieras llamarlo, en la lìnea de muchos films contemporaneos que se rodaron en toda Europa en aquel tiempo.
El film ganò un premio en el festival de cine fantàstico de Sitges, España, en 1977.
ACEPTABLE ENTRETENIMIENTO.
Primero, en una casa de campo, se dedicarà a recoger hermosas autoestopistas a las que les mete mano y se las folla. Luego estas, viendo que el tipo està mas loco que una regadera, escapan y este luego las persigue a caballo o en coche, hasta cargarselas.
Hasta ahì el film es una patata del montòn, pero cuando el tipo se va a su grandioso castillo, el film gana mucho.
En el castillo hay un desfile de bellezas que salen en pelotas realmente entretenido, ademàs de mostrarnos lindezas como una zorra bailarina danzando alrededor de un grotesco ìdolo africano(luego descubrimos que le molaban las pollas negras) o una impagable escena de una mujer huyendo desnuda por el castillo, y es atacada por un enorme perro gran danès(el cabròn parece un pequeño caballo) y cuando la mujer se pone a cuatro patas huyendo, y le pone el culo mirando a Pamplona al feroz chucho, este se le tira encima en lo que parece el inicio de una secuencia porno de zoofilia. Afortunadamente la mujer, antes de que Scooby Doo la engatille a cuatro patas, se logra zafar y escapa corriendo del animal que no sabemos si està furioso o cachondo.
Luego tenemos la grandiosa escena de la pareja presa de un especie de maquinaria medieval hecha para martirizar y matar gente, en la que una plataforma llena de afiladas barras de metal cae para atravesarlos como si fueran brochetas de carne. Algo mil veces visto en otros films y videojuegos(en los que la gente escapa siempre) pero que en esta ocasión aquì no hay suerteo margen de error, y la desventurada pareja la palma como Felipòn.
Al final todo acaba en una especie de sorpresa shock, que tira al cine de fantasmas y venganzas de ultratumba.
La pelìcula, en resumidas cuentas, mezcla castillos, una ambientaciòn gòtica y un montòn de mujeres de buen ver desnudas, con asesinatos. La cosa no es que sea genial o una obra maestra, pero se deja ver y es bastante entretenida.
A mí, personalmente, me gustò bastante. Lo que no dejo de preguntarme es como o porquè este film fue prohibido en Francia en su tiempo, cuando tampoco es algo superviolento o escandaloso. No creo que por mostrar algunos desnudos frontales integrales o algunas escenas bastante lights de sadomasoquismo, fueran motivos suficientes, pero quien sabe. Igual a algùn censor medio religioso y puritano, se le indigestò la pelìcula.
Es mas bien un film de terror convencional de su tiempo, eurohorror o horrorerotica, o como quieras llamarlo, en la lìnea de muchos films contemporaneos que se rodaron en toda Europa en aquel tiempo.
El film ganò un premio en el festival de cine fantàstico de Sitges, España, en 1977.
ACEPTABLE ENTRETENIMIENTO.